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AL PIE DE LAS LETRAS

 Publicado: 03/06/2020

Poemas inéditos


Por Nancy Ghan


Carta de presentación


Tengo fuego y olas
Tengo gritos y silencios
Soy el escándalo hermético
La contradicción
La lucha de opuestos
Todo en un único cofre
Caja de Pandora
Vianda de tu almuerzo
Soy la puerta sin cerradura
El portal de un Edén
Con cien monstruos adentro

 

La guerra


Con la impunidad de los labios rojos
Voy a declararte la guerra
Voy a gritarte verdades
Escupir sobre tu desidia
Y sobre todas tus negligencias

Con la llamarada rugiendo en la boca
Voy a darte una tregua
Para que vengas a buscarme
Me lleves a tu casa
Me declares la guerra

   

La espera


Espera de acero
de hierro caliente
de filos cortantes
Aviones de papel
que se lanzan al aire
en un día sin viento
o en una tarde de lluvia

Espera envenenada
intoxicada
indigesta
Espera de sal
de sed y desierto
de vidrios rotos en el piso

Espera de nada Espera de todo

 

Acuático


Hay en cada gota
que sacás de mi cuerpo
un poco de la sal
y un poco del aire
En los tibios líquidos de la llegada
en las frías lágrimas de la partida
en cada fluido que me brota
cuando algo te aleja o te aproxima
Hay en cada uno de ellos
una sutil parte de mí
que se va yendo hacia el mundo
y una sutil parte del mundo
que se va yendo de mí

Y así me volví manantial
catarata
maremoto
Nutritiva para tu cauce
de río enloquecido
Destructiva para mis tierras
de campesinos hambrientos
y para las fértiles praderas
que, a veces, presiento,
jamás vas a sembrar

 

Parasitosis


Dentro de mí
debajo de mi piel
en algún lugar se quedó
Creció como un tumor
Se extendió
me parasitó
se nutrió de mí
Bebió de mis jugos
comió de mis carnes
Me dijo que era suya
que yo era el huésped
Y lo dudé
después le creí
después lloré

Más tarde sequé mis lágrimas
y lo escuché
le obedecí
pero volví a llorar
Y entonces pensé el plan
para matarlo
para arrancarlo

Dejé de comer
pero él vivía del agua
Dejé de beber
pero él vivía del aire
Dejé de respirar
y siguió viviendo

Pero yo no

Así me liberé

 

Última noche


Un perro zombie en la tele
Una manta para mi desnudez
para la de afuera
            la que ves, tocás, olés
Que se joda mi desnudez de adentro
la que te ofrezco en bandeja
            la que escupís, pateás, rompés

Después
mensajes sin respuesta
no-despedida
nunca más

Y aún así
tus ojos en mis madrugadas
todos tus besos cachetada
siempre
en mi cabeza
siempre
en loop

 

Ocultismo


¿Qué esconde tu almohada?
¿Qué dejaste oculto ahí?
¿Cuántas de tus humedades
se secaron en ella?
En las noches de mil ausencias
carrousel de dudas y deudas
girando en tu cabeza
Noches
que se hacen día ante tus ojos
abiertos, aguados, ardiendo
Tus ojos
que quisieron esconder
y no pudieron
Quisieron esconder
como esconden tus sábanas
tu colchón
toda en tu cama
Ahí
donde nunca aprendí a quedarme
ni oculta
ni a la vista

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