Compartir
Se pintan casas a domicilio
Por Cuque Sclavo
Ojalá se me hubiese ocurrido una publicidad tan inolvidable como esta del título y que vi en un rancho de Parque del Plata al Norte hace muchos años.
Siempre me impresionaron las buenas publicidades. De todos los tiempos, menos el de hoy. Algunas antiguas, de la época en que se llamaba propaganda, avisos comerciales, y los locutores todavía no eran comunicadores sociales. Como fue esta que salió a la vuelta de Batlle de su viaje por Europa y África:
"Una de las primeras cosas que se le ocurrió a Batlle apenas llegó al país fue recomendar que nunca falte en su mesa EL ACEITE BAU convencido de su popularidad".
Y allí, en el aviso de prensa, estaba nomás Don Pepe Batlle dibujado con su bigotón y una lata de aceite BAU en una mano, mientras con la otra levantaba un dedo en inequívoco gesto autoritario y presidencial. ¿Te das cuenta?
Otra, de 1900:
"ESPECTÁCULOS - Antigua Cervecería Richling en la Aguada, Calle Yatay 12 a 14. Todos los sábados Gran Concierto por una banda militar a las 8. Entrada Gratis".
En el viejo y querido Palacio Sudamérica, ¡qué maravilla!
Otro aviso de aquella época:
LA ELEGANCIA-173- Calle Sarandí-175. "Se ruega al dueño de dicho establecimiento pase por la calle 25 de Mayo 161 para pagar lo que debe".
Mirá vos cómo se quemaba a los deudores entonces. Más que La Elegancia era La Vergüenza ante toda la gente paqueta del Bulevar Sarandí.
Y ¿qué me decís de esta mujer de saber absolutamente enciclopédico que ofrece sus servicios de este modo?:
"TERESA MERALDI- PROFESORA DE VARIAS CIENCIAS- Recién llegada de Europa hace saber al respetable público de esta República del Uruguay que da lecciones de magnetismo, de teoría, de música, de canto, de piano, de violín, de guitarra, de declamación y de mímica. La profesora habla portugués, italiano, francés y genovés. Las personas que deseen consultar con la susodicha profesora, concurran a su estudio en la Plaza Independencia Nº 20 primer piso, cerca del hotel-café Bordeaux".
Muy cerquita de allí existía una mujer tan maravillosa como la del tango:
"ADIVINADORA " Del presente y porvenir como ninguna en Montevideo. Calle de los Andes Nº 197?.
Y, ya que estamos, tomemos un vinito en La Giralda, allí, donde se estrenó nuestra famosa Cumparsita en 18 de Julio Nº 7, que así hacía, de este modo, su verseado "advertising":
"Por más que lo crea guasa se tiene como muy cierto, que los vinos de esta casa hacen revivir a un muerto"
O, si no, frente al Solís existía otra opción:
"TUPÍ NAMBÁ- Buenos Aires- Frente al Solís Nunca digerir podrá Con felicidad usté, Si no toma del café Que sirve el Tupí Nambá"
Y mirá este hallazgo publicitario de Don Francisco Piria, quien para vender una yerba que derrotase a la competencia inventó esta simple frase con la que hizo una campaña publicitaria triunfal, simplemente añadiendo:
"Esta yerba no contiene "Presipitatum Rojus Arenilla"".
Un invento total. Pero marchó para bien. Fue como cuando le puso Nueva Roma a la Mondiola y la vendió todita, desde Julio César a Marco Bruto. Y con eso, ese genio publicitario que fue Don Piria, mató.
Hoy hubiesen jeteado en el brief que el approach al producto por parte de Don Francisco intentaba posicionar a la cotidiana y rantifusa yerba mediante una problematización, complejización o dramatización de la misma, buscándole un nicho dentro de lo medicinal. Lo que la convertía en un challenger, en términos de marketing, de aquel famoso:
"VINAGRE AROMÁTICO- Higiénico y antifelítico, mompelas, perfumador. Este vinagre balsámico, espirituoso y tónico, favorable a la salud se emplea para el tocador, los baños y la salubridad. Sirve para el cuidado higiénico del aseo y mantiene el cuerpo en buen estado, impide y cura los nacidos, ardores, empeines, arrugas y alteraciones del cutis que refresca, suaviza, blanquea, ablanda y lustra. Quita lo pegajoso y lo amargo de la boca, refresca y dá un aliento agradable, limpia, blanquea los dientes y fortalece las encías. Con algunas gotas de este vinagre en un vaso de agua se consigue un digestivo excelente".
Después de esto, inventá algo vos. Sobre todo después de las campañas electorales. Malitas, las pobres. En fin, no me hagas hablar.