“TENSIONES IDENTITARIAS”

Conversación con Gerardo Mantero

El tema de la identidad ha sido desde siempre de interés uruguayo y universal, y en el correr del tiempo se ha complejizado a partir de muchos cambios. El título de esta muestra, donde la palabra “tensión” se vuelve clave, más diversos textos en el catálogo de la misma, echan luz sobre el asunto. Nos interesa que nos cuentes acerca de este tema: ¿cómo lo pondrías en palabras cuando ya lo has puesto en imágenes?

El tema de las identidades se puede abordar desde distintos ángulos, sin poder evitar enfrentarse a su intrincada complejidad. Por un lado, en un mundo homogeneizado, en la búsqueda de la identidad actúa un elemento diferenciador de pertenencia cultural, étnica, religiosa, de género, etcétera. En el catálogo de Tensiones identitarias cito al sociólogo brasileño Renato Ortiz, que al respecto dice: “Este mundo civilizado, en donde explota la reivindicación de lo diverso, muchas veces no es un mundo plural, con todo lo que esto implica, sino un mundo diverso, con identidades fuertemente asimétricas y pulverizadas, que no se integran ni aceptan”. Por otro lado, la construcción de nuestra identidad es muy interesante, esa identidad negativa, nuestra identidad sería no tener identidad, desde el fracaso del proyecto artiguista que jamás pensó en un Estado autónomo, esa falta de idiosincrasia termina siendo una idiosincrasia. Y por último, mi encare no está exento de emotividad, en el catálogo de la muestra cito a José Martí: “De una patria, como de una madre, nacen los hombres”; yo me considero hijo de la cultura montevideana, y la muestra se la dediqué a compañeros de ruta de todas las disciplinas artísticas que me ayudaron a formarme, a los que están y en espacial a los que partieron, que son y fueron constructores de nuestra identidad.

Los cuadros de esta muestra son con técnica collage, donde interviene la pintura, el dibujo y el grabado, amén de videos que se muestran en pantallas. Tienen varios formatos y medidas y cada uno un título que es parte de la obra, aunque no la condiciona. Los cuadros aludidos son matéricos, en soporte papel... Nos gustarían algunos comentarios de tu parte específicamente sobre estos temas pictóricos, más allá de lo conceptual ya aludido.

Mi lenguaje se característica por trabajar entre la frontera de la figuración y la abstracción utilizando técnicas mixtas, acrílicos, tintas chinas, pasteles oleosos, grabado, collage, el estar atentos a los accidentes de las aguadas, poniendo el énfasis en la composición. Yo utilizo la técnica al servicio de lo que se quiere decir. En cuanto al video, se expuso la segunda versión, con edición de Lala Severi y música de Carlos da Silveira.

Tu actividad como artista visual es compartida con otras, tales como curador de la Sala Nicolás Loureiro de El Galpón, más la de realizador y periodista en la ya legendaria revista La Pupila. Tu trayectoria e inserción dan pie a que te pidamos algunas reflexiones generales sobre la situación de las artes visuales en el Uruguay de hoy.

En las últimas décadas, el arte ha jugado un papel creciente a la hora de proyectar una mirada crítica desde las identidades, el poder, y distintas conflictividades que caracterizan las transformaciones del mundo contemporáneo. Paralelamente, el arte contemporáneo se parece mucho a una kermés, donde todo flota y también existe el simulacro y, si bien se pueden mostrar problemáticas y patologías sociales, en muchos casos es una mera referencia, no se lo resignifica ni se le agrega un nueva mirada. Dicho esto, en el Uruguay, un factor determinante en el escenario del arte contemporáneo, como lo es el mercado, tiene una incidencia muy menguada. Creo que este factor, y la gran tradición que existe en nuestras artes visuales, tiene como consecuencia un escenario diverso en tendencias, con una cantidad muy considerable de propuestas de calidad de artistas con lenguajes consolidados, y una producción asombrosa en cantidad sin un contexto que lo explique. Otro tema es el análisis de la institución arte, la realidad museística, la educación, las nuevas formas de difusión, temas sobre los que, por motivos de espacio, no me voy a extender.

En diversas conversaciones contigo han surgido muchos y diversos temas. Te proponemos que abordes cualquiera de ellos como desees hacerlo. Para acotar el margen, menciono tus experiencias en el exterior, tu visión de la situación geopolítica mundial, el tema de la inmigración... Son temas de largo desarrollo y no queremos abusar de tu tiempo y energía, así que dejamos a tu criterio el hablarnos sobre alguno de estos temas u otros no mencionados.

La perplejidad que produce la realidad nos obliga a replantearnos desde dónde tiene que partir el necesario análisis. Son más las preguntas que las respuestas, en un escenario agridulce en el cual cuando se logran avances, estos conviven con situaciones incambiadas en el tiempo y por tanto agravadas por la inacción.

El arte, como siempre, remite a su tiempo, y los artistas y los intelectuales parecen desconcertados ante la avalancha tecnológica, los desafíos de interpretación de una realidad gelatinosa y gélida que los interpela sin las certezas del pasado. El acto de reflexionar es más que nunca necesario, ya sea como simple gesto de resistencia o como un intento de construcción de parámetros que reubiquen al sujeto como el centro de acción, en un momento del mundo, al decir de Franco Berardi, “dominado por la patología”. 

¿Habrá Tensiones identitarias en otra sala, u otro proyecto expositivo en vistas? Con esa pregunta cerramos esta pequeña nota, agradeciendo tu buena disposición y el tiempo que te tomaste para respondernos.

Este es un año muy singular y de mucha actividad, ya que cumplimos 15 años de vida ininterrumpida de La Pupila, y para festejar este hecho inédito vamos a editar un libro de ensayos sobre arte y se realizará una muestra en el Subte Municipal de todas las portadas de la revista hasta la fecha, más otras actividades que estamos definiendo. En la sala Nicolás Loureiro tenemos un año muy intenso; te doy dos adelantos de significación: a mediados de abril inauguraremos una muestra del gran caricaturista Fermín Hontou, recientemente fallecido, y en junio, una muestra de Carlos Palleiro sobre la gráfica política de los años 70.